Toda la delicadeza del sirope de avellana 1883 se expresa con poderosas notas tostadas y vainilla, muy cerca del praliné. Es una agradable subida de notas aromáticas con mantequilla, luego vainilla, y después deja adivinar el “verde terroso” típico de la avellana fresca. Su hermosa textura fluida y luminosa, su color dorado y amarillo pajizo da lugar a la expresión armoniosa de una avellana característica. La sensación en boca seduce, gusto franco y poderoso. Sin gluten y vegano.